Los lentes bifocales y los lentes progresivos son una de muchas soluciones que existen para el tratamiento de la presbicia.
La presbicia es un problema visual que afecta a muchas personas a medida que envejecen.
Es un tipo de defecto visual que se produce debido a la pérdida gradual de la capacidad del cristalino del ojo para enfocar objetos cercanos.
Como resultado, las personas que padecen presbicia pueden tener dificultades para leer textos pequeños, trabajar en la computadora o realizar actividades cercanas.
La prevalencia de la presbicia varía según la edad y la población. Sin embargo, se estima que a partir de los 40 años, el 100% de las personas experimentarán algún grado de presbicia.
Además, se cree que aproximadamente 1,8 mil millones de personas en todo el mundo tienen presbicia y se espera que este número aumente a 2,1 mil millones en el año 2020.
Hemos escrito un artículo muy completo acerca de la presbicia, el cuál podrás encontrar dando clic aquí.
Debido a la prevalencia de la presbicia, es importante tener opciones de tratamiento efectivas para aquellos que la padecen.
Hay varias opciones de tratamiento disponibles, y cada una tiene sus propias ventajas y desventajas.
Por lo tanto, es importante que los pacientes comprendan las opciones de tratamiento disponibles para ellos y trabajen en estrecha colaboración con su profesional de la salud visual para encontrar la mejor solución para sus necesidades.
En este artículo, nos centraremos en dos opciones de tratamiento comunes para la presbicia: los lentes bifocales y los lentes progresivos.
Lentes bifocales
Las lentes bifocales son una opción común de tratamiento para la presbicia.
Estas lentes están diseñadas con dos segmentos diferentes que permiten al usuario ver objetos tanto de cerca como de lejos sin tener que cambiar las gafas.
Los dos segmentos en las lentes bifocales son claramente distinguibles, con la parte superior de la lente diseñada para enfocar objetos distantes y la parte inferior de la lente diseñada para enfocar objetos cercanos.
Las lentes bifocales pueden venir en diferentes diseños, incluyendo la línea de segmento visible y la línea de segmento invisible.
Las lentes bifocales se dividen en dos tipos principales: las lentes bifocales estándar y las lentes bifocales ocupacionales.
Las lentes bifocales estándar están diseñadas para corregir la presbicia y otros problemas de visión comunes, mientras que las lentes bifocales ocupacionales se utilizan para actividades específicas que requieren una vista nítida de cerca, como la lectura de partituras musicales o la costura.
Entre las ventajas de las lentes bifocales se encuentra que son una opción de tratamiento accesible y ampliamente disponible. Además, ofrecen una transición suave entre las dos distancias focales.
Sin embargo, una de las principales desventajas de las lentes bifocales es la línea visible en el lente, que puede ser una distracción visual para algunas personas.
Además, las lentes bifocales pueden no ser adecuadas para actividades que requieren una visión intermedia clara, como trabajar en la computadora.
En cuanto a los buenos candidatos para las lentes bifocales, aquellos que tienen una presbicia leve a moderada y otros problemas de visión comunes pueden ser buenos candidatos.
Sin embargo, los pacientes con presbicia avanzada pueden necesitar opciones de tratamiento más avanzadas.
Los pacientes también deben trabajar con un optometrista para determinar si las lentes bifocales son la mejor opción para sus necesidades individuales.
Lentes progresivos
Las lentes progresivas son otra opción común de tratamiento para la presbicia.
Estas lentes están diseñadas con una transición suave y continua desde la parte superior de la lente, que se enfoca en objetos distantes, hasta la parte inferior de la lente, que se enfoca en objetos cercanos.
A diferencia de las lentes bifocales, las lentes progresivas no tienen una línea visible que separe las dos distancias focales.
Hay varios tipos de lentes progresivas disponibles, que difieren en la forma en que se distribuye la potencia de la lente.
Estos incluyen lentes progresivas clásicas, lentes progresivas digitales y lentes personalizadas.
Las lentes progresivas digitales utilizan tecnología avanzada para proporcionar una transición más suave entre las diferentes distancias focales, mientras que las lentes personalizadas se adaptan a la forma y las necesidades únicas de cada usuario.
Entre las ventajas de las lentes progresivas se encuentran que ofrecen una transición suave y sin interrupciones entre las diferentes distancias focales, lo que las hace ideales para actividades que requieren una visión intermedia clara, como trabajar en la computadora.
Además, las lentes progresivas no tienen la línea visible que se encuentra en las lentes bifocales, lo que las hace más atractivas visualmente.
Sin embargo, una de las principales desventajas de las lentes progresivas es que pueden ser más costosas que las lentes bifocales.
También las lentes progresivas tienen zonas de aberración visual en ambos lados de la zona que contiene la graduación. En esta zona no hay graduación y se vera borroso. (Ver imagen ejemplo de abajo)
Lo cual puede dificultar la adaptación a ellas para algunas personas.
En cuanto a los buenos candidatos para las lentes progresivas, aquellos con presbicia moderada a avanzada y otros problemas de visión comunes pueden ser buenos candidatos.
También son ideales para aquellos que buscan una solución sin la línea visible que se encuentra en las lentes bifocales.
Sin embargo, algunos usuarios pueden experimentar un período de adaptación mientras se acostumbran a la transición suave entre las diferentes distancias focales.
Es importante trabajar con un profesional de la salud visual para determinar si las lentes progresivas son la mejor opción para las necesidades individuales de cada paciente.
Cómo elegir entre lentes bifocales y progresivos
Al decidir entre lentes bifocales y lentes progresivos, hay varios factores importantes que deben considerarse.
Algunos de estos factores incluyen el estilo de vida y las actividades diarias del usuario, la cantidad de tiempo que pasan frente a la computadora o realizando actividades que requieren visión intermedia, y el presupuesto disponible para el tratamiento.
Para determinar qué lentes son las adecuadas para ti, es importante acudir con un optometrista que pueda realizar un examen ocular completo y evaluar tus necesidades individuales.
Durante este examen, el profesional de la salud visual medirá la refracción de tus ojos y evaluará la salud de tus ojos.
También preguntará sobre tu estilo de vida y tus necesidades visuales para determinar qué tipo de lentes serán más beneficiosos para ti.
Al elegir entre lentes bifocales y progresivos, también es importante considerar la comodidad y la facilidad de adaptación.
Los usuarios de lentes bifocales pueden necesitar tiempo para acostumbrarse a la línea visible que se encuentra en la lente, mientras que los usuarios de lentes progresivos pueden necesitar tiempo para adaptarse a la transición suave entre las diferentes distancias focales.
Es importante hablar con tu optometrista sobre cualquier preocupación o preguntas que puedas tener sobre la adaptación a las nuevas lentes.
Para adaptarse a las nuevas lentes, hay algunos consejos útiles que pueden ayudar. En primer lugar, es importante usar las lentes regularmente para acostumbrarse a ellas.
También es útil seguir las instrucciones del profesional de la salud visual sobre cómo usar y cuidar las lentes adecuadamente.
Por último, es importante tener expectativas realistas y comprender que puede haber un período de ajuste mientras te acostumbras a las nuevas lentes.
Con el tiempo y la paciencia, la mayoría de las personas se adaptan bien a las lentes bifocales o progresivas y disfrutan de una visión clara y cómoda.
Lentes monofocales
Los lentes monofocales son una opción económica para tratar la presbicia en personas que solo necesitan corrección visual para la lectura o vision cercana.
Si sabes cual es tu graduación para lectura, estos lentes los puedes conseguir facilmente en farmacias, super mercados y tiendas de auto servicio de manera económica.
Estos lentes tienen una sola potencia y se diseñan para proporcionar una visión clara y enfocada a una distancia fija.
Sin embargo, es importante destacar que los lentes monofocales no son adecuados para personas que necesitan corrección visual para la visión de lejos y de cerca.
Es importante señalar que el uso de lentes monofocales para tratar la presbicia puede tener algunas consecuencias.
Aunque estos lentes pueden proporcionar una visión clara para la lectura, pueden causar problemas de visión a distancia.
Si alguien intenta usar lentes monofocales para ver objetos a distancia, como cuando se está conduciendo, se experimentará una visión borrosa y probablemente mareos.
Esto puede ser especialmente peligroso al conducir o realizar otras actividades que requieren visión nítida y enfocada a diferentes distancias.
Por lo tanto, es importante destacar que los lentes monofocales deben usarse sólo para leer o ver objetos cercanos y no para actividades que requieren visión a diferentes distancias.
Las personas que necesitan corrección visual para la visión de lejos y de cerca deben considerar otras opciones, como lentes bifocales o progresivos.
Otras opciones de tratamiento para la presbicia
Además de las opciones de lentes bifocales, progresivos y monofocales, existen otras opciones de tratamiento para la presbicia. A continuación, se describen tres de ellas:
1. Lentes de contacto de monovisión
Esta opción implica el uso de lentes de contacto con diferentes potencias en cada ojo. Un ojo se usa para la visión de cerca y el otro para la visión de lejos.
Esta opción puede requerir un período de ajuste, pero muchas personas encuentran que es una solución eficaz para su presbicia.
2. Lentes de contacto multifocales
Estas lentes contienen varias potencias en un solo lente y permiten una transición suave entre la visión de lejos y la de cerca.
Las lentes de contacto multifocales son una buena opción para las personas que no quieren usar lentes bifocales o progresivos.
3. Cirugía refractiva
Esta opción implica la modificación de la forma de la córnea del ojo para corregir la presbicia.
Hay varios tipos de cirugía refractiva, incluyendo la queratoplastia conductiva y la cirugía de lentes intraoculares.
Esta opción debe discutirse con un oftalmólogo para determinar si es adecuada y segura para el paciente.
También se puede acudir con un optometrista para saber si es candidato para alguna de esas cirugías.
Es importante tener en cuenta que cada opción de tratamiento para la presbicia tiene sus propias ventajas y desventajas.
Es recomendable que las personas discutan sus necesidades y preferencias con un profesional de la salud visual para determinar la mejor opción de tratamiento para ellas.
Conclusión
La presbicia es una condición visual que afecta a muchas personas a medida que envejecen.
Es importante recordar que cada persona tiene necesidades visuales únicas y es recomendable consultar con un optometrista para determinar la mejor opción de tratamiento para ellos.
Además, es importante mantener una buena salud ocular mediante el uso adecuado de las gafas o lentes de contacto.
También una dieta saludable rica en nutrientes, el uso de gafas de sol para proteger los ojos de los rayos UV y visitas regulares al oftalmólogo y/o optometrista para detectar cualquier problema ocular.
En resumen, hay varias opciones de tratamiento para la presbicia disponibles y es importante discutir sus necesidades y preferencias con un profesional de la salud visual para determinar la mejor opción para usted.
Mantener una buena salud ocular es esencial para disfrutar de una buena calidad de vida a medida que envejecemos.